Jueves, 09 Mayo 2024

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Noticias Internacionales

Noticias Internacionales (145)

 Boicot a la integración emancipadora

El empuje conservador y neoliberal en América Latina y el Caribe, aliado a los intereses imperialistas, ha desarrollado en los últimos meses nuevas iniciativas orientadas a establecer un nuevo tablero geopolítico regional y mundial buscando frenar y destruir los empeños de liberación nacional y continental de los procesos de integración y unidad emancipadora de la Patria Grande elaborados en los pasados quince años por los gobiernos nacionalistas, progresistas y de izquierda.

Se ponen, de esta manera, frente a frente dos proyectos estratégicos de la región: el de la liberación o el de la dominación.

La reciente creación --22 de marzo pasado—del Foro Para el Progreso de América del Sur (PROSUR), impulsada apresuradamente por los presidentes de Colombia, Iván Duque, y de Chile, Sebastián Piñera, y aceptada por los de Brasil, Jair Bolsonaro, Argentina, Mauricio Macri, Ecuador, Lenin Moreno, de Paraguay, Mario Abdo, y de Perú, Martín Viscarra, en la cumbre de Santiago de Chile, fue precedida por la acción de Macri y Bolsonaro de debilitar a la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) con la suspensión de su participación en la misma y continuada por Moreno con el despojo de su sede en Quito.

Si bien estos presidentes reconocieron el 23 de febrero, con gran repercusión en los grandes medios de comunicación empresariales, como presidente de Venezuela al fantoche de Donald Trump, Juan Guaidó, evitaron hacer el ridículo mayor impidiendo su presencia en la reunión de Santiago. Esto no significa, de ninguna manera, que la conspiración imperialista contra el gobierno revolucionario bolivariano y chavista de Venezuela presidido por Nicolás Maduro deje de contar con el concurso de los gobiernos de estos países, entre ellos sobresale el de Colombia que cuenta con nueve bases militares norteamericanas en su territorio.

Quebrar el proceso de la integración de la Patria Grande

El Foro Para el Progreso PROSUR, cuyo nombre rememora la Alianza Para el Progreso de los años sesenta impuesta por Estados Unidos en varios países de América Latina para afianzar su control regional en la Guerra Fría e impedir la influencia de la Revolución Cubana, busca desmantelar los avances revolucionarios de la Patria Grande. La formación y fortalecimiento, desde 2004, de PETROCARIBE, Alternativa Bolivariana de los Pueblos (ALBA), Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR) y Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) permitió a América Latina y el Caribe convertirse no solamente en un proyecto profundo de integración regional al margen del control de Estados Unidos, sino en una fuerza con peso propio en estrategia mundial de la multipolaridad.

Luego de derrotar al proyecto imperialista del Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) defendido por el entonces presidente de EEUU, George Bush, en la Cumbre de Mar del Plata en noviembre de 2005, se aceleró el proceso de integración emancipadora bajó el liderazgo de Hugo Chávez de Venezuela, Lula Da Silva de Brasil, Fidel Castro de Cuba, Néstor Kirchner de Argentina, Evo Morales de Bolivia, Rafael Correa de Ecuador, Daniel Ortega de Nicaragua y José Mujica, entre otros, y con un claro discurso bolivariano por la segunda independencia, se procedió a crear las instituciones correspondientes con el apoyo de los movimientos populares.

En 2008 se formalizó la existencia de UNASUR con todos los países de América del Sur y una estrategia integral que desarrolló políticas de comercio e integración económica y financiera, incluidos un fondo monetario y una moneda propios; de defensa militar con autonomía de Estados Unidos; de libre tránsito, migración y reconocimiento de la ciudadanía sudamericana; de lucha contra las droga y el terrorismo internacional; y de educación, salud, ciencia, tecnología y planificación conjuntas.

Por otra parte alcanzó logros de envergadura como la defensa de la democracia en la región, la solución de conflictos entre Venezuela y Guyana, la defensa de los gobiernos democráticos de Bolivia y Ecuador ante lo intentos de guerra civil y golpe de Estado y la pacificación en Colombia.

En 2010 se consolidó la CELAC como instancia de debate y consenso político entre los 33 países de América Latina y el Caribe, con la exclusión de Estados Unidos y Canadá, avanzando por primera vez en la construcción de la integración del conjunto de la Patria Grande como soñaron Simón Bolívar, José de San Martín, Francisco Morazán, José María Morelos o José Martí y estableciendo el principio de declarar a América Latina y el Caribe como zona de paz, cooperación e integración.

Inestable correlación de fuerzas

Si bien la iniciativa política en la disputa estratégica de los proyectos de integración favorece en la coyuntura al grupo de gobiernos conservadores y neoliberales de PROSUR tanto por su número como por su peso económico y geopolítico, es también cierto que varios de estos gobiernos son débiles como el del interino del Perú que se encuentra en una situación de alto rechazo del pueblo, el de Colombia con un proceso de paz muy frágil o el de Argentina que ha destrozado la economía del país y de la gran mayoría de la población, la misma que deberá elegir nuevos gobernantes en octubre de 2019.

La potencia y peso mundial de Brasil lleva a su Estado a la contradicción entre encabezar un bloque poderoso con todos los países de la región, como en la década pasada, o a convertirse en peón político de Estados Unidos a pesar de la gran dimensión e influencia económica de China. Bolsonaro encuentra fuertes críticas de sectores empresariales, académicos, políticos y militares ante esta situación que pone el territorio amazónico en manos de Estados Unidos y al mismo tiempo crea malestar social por sus posiciones reaccionarias y antipopulares.

A su vez, la crisis provocada en Venezuela por el bloqueo y el boicot comercial, financiero y económico ha influido en sus iniciativas de integración, aunque se mantienen sólidos PETROCARIBE y ALBA, en tanto que Bolivia y Uruguay apoyan con firmeza la integración sin exclusiones y, en el caso del primero, ha manifestado sin tapujos su total apoyo y solidaridad con el gobierno de Maduro y con el proyecto de integración emancipadora.

En el marco de CELAC, se mantienen su estructura y principios, particularmente con la clara posición de Manuel López Obrador de México de impulsar el acercamiento de los pueblos y países de la región frente a las agresiones norteamericanas, aunque en los últimos dos años se ha tratado de dañar la influencia de CELAC con las acciones impulsadas por el Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, contra el gobierno democrático de Venezuela, sin lograr su objetivo.

Estrategias geopolíticas en la región

La agresiva política de Washington (Trump y CIA) en América Latina y el Caribe con la finalidad de recuperar terreno perdido frente a su notable retroceso mundial choca con la emergencia de un mundo multipolar, en el cual las potencias económicas y comerciales de China e India se hacen muy fuertes, la fortaleza militar de Rusia es incuestionable como en los casos de Ucrania, Siria o Venezuela, o la insubordinación de Turquía, la Unión Europea, Corea del Norte o Irán hacen muy difícil que el dominio norteamericano recupere el lugar estelar que tenía en el pasado.

Con la mirada puesta en las próximas décadas y hacia fin de siglo, cuando la influencia estadounidense, china y rusa en América Latina y el Caribe alcanza niveles de disputa y choques de estrategia geopolítica global es pertinente reiterar nuevamente la disyuntiva para nuestros pueblos: “el siglo XXI nos encontrará unidos o dominados” como afirmara Juan Domingo Perón y argumentaran Jorge Abelardo Ramos, Andrés Soliz Rada y Norberto Galasso.

PROSUR no tiene identidad ni raíces en la lucha emancipadora y se inscribe en la lógica de la relaciones de dominación Norte-Sur, en tanto que UNASUR y CELAC son propuestas de unidad en el espíritu de la Patria Grande en la concepción de la Cooperación Sur-Sur.

 

Eduardo Paz Rada : Sociólogo boliviano y docente de la UMSA. Escribe en publicaciones de Bolivia y América Latina.

https://www.alainet.org/es/articulo/199334

El Foro de Comunicación para la Integración de NuestrAmérica manifiesta su enfático rechazo a la detención del periodista Julian Assange por parte de la policía del Reino Unido y demanda su inmediata liberación para que éste elija, en pleno uso de sus derechos, a qué país quiere dirigirse.

Denunciamos la responsabilidad conjunta de los Estados Unidos, Gran Bretaña y Ecuador en esta flagrante violación de los Derechos Humanos y del Derecho Internacional. El Derecho al asilo es un mandato universal inscrito entre los más altos preceptos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Bajo el manto de supuestas infracciones a restricciones impuestas por el gobierno de Lenin Moreno a la estadía del Sr. Assange en la Embajada de Ecuador en Londres, se expulsa a quien el Estado ecuatoriano se comprometió a proteger. Se vulneran así garantías y mancilla el prestigio internacional del país en materia de respeto a convenciones internacionales de derechos humanos.

La persecución de la que es objeto el Sr. Assange es una persecución a la libertad de investigación y de información de los ciudadanos. Con ello, se pone en peligro a todo periodista y comunicador valiente que se anime a develar la criminalidad que subyace en gran parte de los estamentos de una estructura pseudodemocrática en decadencia. Los gobiernos que persiguen al Sr. Assange son los que temen que se divulgue la verdad.

 

 

Julian Assange no ha cometido ningún crimen. Ha cumplido el deber periodístico de informar al mundo acerca de la indecencia de quienes a diario conspiran contra la democracia en todo el mundo. El trabajo de Assange y el portal Wikileaks es de gran estatura moral y valor ético, ya que denunció las barbaridades de EEUU a nivel mundial, la manipulación, la mentira, las intrigas entre bambalinas y el espionaje a escala global.

Mientras tanto, las grandes compañías de Internet extraen y venden a diario datos de millones de personas, sin que ningún Estado las denuncie por espionaje o violación del derecho a la intimidad.

Como articulación de comunicadores y movimientos sociales de América Latina y el Caribe expresamos nuestra solidaridad a Julian Assange y nuestro compromiso de sumarnos a los esfuerzos por lograr su libertad.

 

Foro de Comunicación para la Integración de NuestrAmérica
@IntegracionLAC

 

Reporteros Sin Fronteras  pide a Londres que no extradite a Assange a Estados Unidos

 

La organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) pidió este jueves al Reino Unido que anteponga la defensa de la libertad de prensa y de protección de las fuentes para rechazar la demanda de extradición a Estados Unidos del fundador de WikiLeaks Julian Assange.

"El Reino Unido debe rechazar las demandas de extradición de Assange a Estados Unidos, que persigue sancionar sus actividades vinculadas con el periodismo", indicó la organización defensora de la libertad de prensa en un comunicado.

Para ello, señaló que Londres tiene que anteponer "los principios de libertad de expresión y protección del periodismo, en particular de la fuentes" y respetar así el derecho británico y las obligaciones internacionales adquiridas por ese país.

Para RSF, el fundador de WikiLeaks -detenido esta mañana en la embajada de Ecuador en Londres, donde llevaba refugiado desde junio de 2012- está acusado en Estados Unidos de delitos relacionados con la libertad de expresión.

En concreto, por la difusión de más de 250.000 telegramas diplomáticos estadounidenses en 2010.

RSF recordó que la acusación de violación que pesaba sobre él en Suecia fue abandonada en 2017.

 

Para el secretario general de RSF, Christophe Deloire, perseguir al responsable de WikiLeaks es "una medida estrictamente punitiva que crearía un peligroso precedente para los periodistas, los emisores de alertas y otras fuentes periodísticas".

Pamela Anderson RECHAZÓ EN FORMA ENÉRGICA

La actriz y modelo, Pamela Anderson, reaccionó duramente a través de redes sociales, tras la detención del fundados de WikiLeaks, Julian Assange, que se realizó hoy en la embajada de Ecuador en Londres.

"No pude escuchar claramente, ¿qué dijo? Se veía muy mal. ¿Cómo pudiste Ecuador? (Porque te expuso). ¿Cómo pudiste Reino Unido? Por supuesto, eres la prostituta de América y necesitas una distracción de tu idiota porquería de Brexit" comentó la famosa actriz.

"¿Y Estados Unidos? Este cobarde tóxico de Presidente, ¿necesita alentar a sus militantes? Eres egoísta y cruel. Has hecho retroceder al mundo". agregó.

Finalmente, Anderson sostuvo que los responsables de la detención son "demonios y mentirosos y ladrones". "Se pudrirán. Y nosotros nos levantaremos".

 

https://twitter.com/pamfoundation/status/1116293898664595456?ref_src=twsrc%5Etfw%7Ctwcamp%5Etweetembed&ref_url=https%3A%2F%2Fwww.soychile.cl%2FSantiago%2FEspectaculos%2F2019%2F04%2F11%2F590377%2FPamela-Anderson-tras-detencion-de-Julian-Assange-Se-pudriran-Y-nosotros-nos-

levantaremos.aspx

 

“Estados Unidos prepara nuevas y significativas sanciones contra Venezuela” 1. Este es el titular de la prensa de hoy. La información la dio a conocer Elliot Abrams, enviado especial del gobierno de Donald Trump para Venezuela.

Declaraciones similares las han ofrecido otros voceros de la Casa Blanca. Recientemente y al mismo estilo del “hacer chillar la economía” pronunciado por Richard Nixon al referirse a Chile a inicios de los 70´, William Brownfield dijo:

“Si vamos a sancionar a PDVSA, ello tendrá un impacto en el pueblo entero, en el ciudadano común y corriente. El contra argumento es que el pueblo sufre tanto por la falta de alimentación, seguridad, medicinas, salud pública, que en este momento quizás la mayor resolución sería acelerar el colapso aunque ello produzca un periodo de sufrimiento de meses o quizás años”2.


Desde 1999, el pueblo venezolano ha sido víctima de sistemáticas agresiones por parte de los gobiernos de EEUU. Recordemos el sabotaje, en noviembre de 2002, contra la principal industria del país, Petróleos de Venezuela. Empresa que genera el 98% de los ingresos en divisas a la nación, y cuya paralización implicó una pérdida de 16.000 millones de dólares para la economía venezolana3.

A partir del año 2013, luego del fallecimiento del presidente Hugo Chávez e iniciando el primer período presidencial de Nicolás Maduro, el gobierno estadounidense retomó las agresiones contra el pueblo venezolano las cuales fueron encubiertas, pero que con el pasar del tiempo son no solo abiertas y formales, sino más intensas.

Se trata de agresiones económicas que no solo se han limitado a medidas coercitivas unilaterales caracterizadas principalmente por bloqueos financieros y comerciales, sino que también han atacado nuestra moneda, el bolívar, induciendo una hiperinflación y una desestabilización de todos los sectores de la economía derivando en una importante contracción de la producción nacional y por lo tanto afectando a la población venezolana. Se trata de una guerra económica4.


Las agresiones económicas forman parte de un plan cuyo objetivo es derrocar el gobierno constitucional, legítimo y democráticamente electo en Venezuela mediante la generación de la desestabilización económica y política, que acompañada con un discurso en el que se responsabiliza al gobierno bolivariano y a su modelo, permita socavar el apoyo popular, así como fracturar a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana que derive en un golpe de Estado.

Dicho plan ha sido develado en dos sendos documentos suscritos por el Jefe del Comando Sur de los EEUU, Kurt Tidd. El primero de ellos titulado Venezuela Freedom-2 Operation” de fecha 25 de febrero de 20165, y el segundo “Golpe maestro para acabar con la ´dictadura´ de Venezuela” de febrero de 20186.

Se lee en estos documentos:


“Intensificar el derrocamiento definitivo del chavismo y la expulsión de su representante, socavar el apoyo popular… Continuar endureciendo la condición dentro de las Fuerzas armadas para llevar a cabo un golpe de Estado…

…Alentar la insatisfacción popular aumentando el proceso de desestabilización y el desabastecimiento…contribuir a hacer más crítica la situación de la población…

…Incrementar la inestabilidad interna a niveles críticos, intensificando la descapitalización del país, la fuga de capital extranjero y el deterioro de la moneda nacional, mediante la aplicación de nuevas medidas inflacionarias que incrementen ese deterioro…Obstruir todas las importaciones y al mismo tiempo desmotivar a los posibles inversores foráneos.”7


En el marco de estos planes, los cuales requieren del apoyo de la comunidad internacional para la posterior entrada en territorio venezolano, el gobierno de los EEUU se plantea como estrategia la generación de una crisis humanitaria que justifique la intervención por la vía de la ayuda humanitaria. Se puede leer en los documentos:

“Especial interés adquiere, en las actuales circunstancias, posicionar la matriz de que Venezuela entra en una etapa de crisis humanitaria por falta de alimentos, agua y medicamentos, hay que continuar con el manejo del escenario donde Venezuela está “cerca del colapso y de implosionar” demandando de la comunidad internacional una intervención humanitaria para mantener la paz y salvar vidas…

…Doctrinariamente hay que responsabilizar al Estado y su política controladora como causal del estancamiento económico, la inflación y la escasez.”8


No podemos dejar de mencionar que el ataque terrorista y criminal al sistema eléctrico nacional perpetrado el 07 de marzo que resultó en un apagón y dejó sin electricidad, agua y comunicaciones a toda la población venezolana por un lapso de casi tres días, poniendo en riesgo la vida de venezolanos y vulnerando sus derechos humanos, forma parte de estos planes para generar caos y desestabilización.

Centraremos este informe en el impacto de las agresiones económicas sobre el pueblo venezolano. Consideramos tanto las medidas coercitivas unilaterales, es decir, las sanciones y bloqueos financieros y económicos, como el ataque a la moneda. Se presenta la metodología para la estimación de las pérdidas ocasionadas por estas agresiones, así como la fuente de la información.

CRONOLOGÍA DE LAS MEDIDAS COERCITIVAS UNILATERALES CONTRA EL PUEBLO VENEZOLANO9


    • Diciembre 2014. El Congreso de EEUU aprueba la Ley 113-278: “Ley Pública de Defensa de los Derechos Humanos y la Sociedad Civil en Venezuela” mediante la cual se establece la hoja de ruta para la política de EEUU hacia Venezuela y que otros Estados, bajo su influencia adopten medidas coercitivas unilaterales en contra de Venezuela.

    • Marzo 2015.  Barack Obama dicta la Orden Ejecutiva 13692 mediante la cual declara a Venezuela como una “amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad nacional y política exterior de Estados Unidos”.

    • Marzo 2016. La administración estadounidense renueva por un año la Orden Ejecutiva 13692.

    • Mayo 2016. El banco Commerzbank (Alemania) cierra las cuentas mantenidas por varias instituciones, bancos públicos venezolanos y Petróleos de Venezuela SA (PDVSA).

    • Julio 2016.



El banco estadounidense Citibank cesa unilateralmente el servicio de cuentas de corresponsalía en moneda extranjera de instituciones venezolanas en EEUU, entre ellas las del Banco Central de Venezuela (BCV).


Las calificadoras de riesgo colocan a Venezuela con el riesgo financiero más alto del mundo (2640 puntos), muy por encima de países en guerra, a pesar de haber cumplido con sus compromisos de deuda externa. Desde el año 2013 Venezuela pagó 63 566 millones de dólares, sin embargo, este índice incrementó 202% durante el mismo período, pasando de 768 en 2012 a 2323 en 201610.  Cada 100 puntos de riesgo-país equivalen a 1% adicional de tasa de interés.

    • Agosto 2016. Novo Banco (Portugal) informa la imposibilidad de realizar operaciones en dólares con bancos venezolanos, por presiones ejercidas por bancos corresponsales de esta institución.

    • Septiembre 2016. El gobierno de Venezuela realiza una oferta para canjear 7 mil 100 millones de dólares en bonos de PDVSA con el fin de aliviar el cronograma de amortización y refinanciar parcialmente sus obligaciones. Las tres grandes calificadoras de riesgo estadounidenses atemorizan a los inversionistas con declarar default (impago) si acceden a la propuesta venezolana.

    • Noviembre 2016. El banco JP Morgan emite una falsa alerta de default sobre un supuesto impago de deuda de PDVSA de 404 millones de dólares.

La petrolera estadounidense, Conoco Phillips, demanda a PDVSA ante una Corte en Delaware, EEUU, por una operación de canje de bonos. El objetivo de este recurso legal consistía en atemorizar a los participantes y con ello hacer fracasar la operación.

    • Diciembre 2016. La empresa Crane Currency, proveedora de billetes del Departamento del Tesoro y contratada por el Estado venezolano para imprimir las piezas del cono monetario, retarda el envío de los nuevos billetes.

    • Julio 2017. La empresa Delaware Trust, agente de pago de los bonos de PDVSA, informa que su banco corresponsal (PNC Bank) en EEUU se niega a recibir fondos provenientes de la petrolera venezolana.

El banco Citibank (EE.UU) se niega a recibir fondos venezolanos para la importación de 300 mil dosis de insulina.

El Departamento del Tesoro, a través de la Oficina para el Control de Activos en el Extranjero (OFAC), dicta sanciones contra un grupo de funcionarios venezolanos, incluyendo al Presidente de la República, Nicolás Maduro Moros, un día después de la celebración de la elección de la Asamblea Nacional Constituyente.

    • Agosto 2017. El banco suizo Credit Suisse prohíbe a sus clientes realizar operaciones financieras con Venezuela.

    • Octubre 2017. El bloqueo financiero de EEUU imposibilita a Venezuela depositar en el banco suizo UBS recursos para vacunas y medicamentos adquiridos a través del Fondo Rotatorio y Estratégico de la Organización Panamericana de la Salud, lo que generó un retraso de cuatro meses en la adquisición de vacunas, alterando los esquemas de vacunación en el país.

    • Agosto 2017. El banco Bank Of China (BOC – Panamá), informa que debido a instrucciones del Departamento del Tesoro de EEUU y a presiones del gobierno panameño, no podrá realizar ninguna operación en divisas a favor de Venezuela.

Bancos rusos informan la imposibilidad de hacer transacciones a bancos venezolanos, por la restricción impuestas por bancos corresponsales en EEUU y Europa, a operaciones de Venezuela.

El corresponsal del banco BDC Shandong, alegando razones administrativas, paraliza una transacción por 200 millones de dólares hacia Venezuela a pesar de que los fondos habían sido girados por la República Popular China.

Donald Trump emite la Orden Ejecutiva 13808: “Imposición de sanciones con respecto a la situación en Venezuela" la cual establece las siguientes prohibiciones:

        ◦ Que el gobierno venezolano adquiera nuevas deudas con vencimiento mayor a 30 días.

        ◦ Que PDVSA adquiera nueva deuda mayor a 90 días.

        ◦ Nueva obtención de acciones por parte del gobierno de Venezuela.

        ◦ Pago de dividendos o distribución de ganancias al gobierno de Venezuela por parte de empresas que operan en EE. UU., lo que afecta especialmente a la refinería CITGO.

La empresa Euroclear encargada de la custodia de una parte de los bonos soberanos de Venezuela, congela operaciones de liquidación de títulos, alegando razones de “revisión”. A la fecha, Euroclear mantiene retenidos 1.600 millones de dólares sin posibilidad de movilización.

    • Septiembre 2017. El Departamento del Tesoro, a través de su Red de Control de Crímenes Financieros (FINCEN), emite una alerta denominada “banderas rojas” que impone un sistema de vigilancia y control a las transacciones financieras de Venezuela, para impedir el pago de alimentos y medicinas.

Un cargamento de 300 mil dosis de insulina pagadas por el Estado venezolano no llegan al país porque el banco Citibank boicoteó la compra de este importante insumo.

El desembarco de 18 millones de cajas de alimentos subsidiados del programa Comité Locales de Abastecimiento y Precios es interrumpido por trabas impuestas por el sistema financiero estadounidense.

Venezuela es incluida en la lista de países con prohibición de viajes a EEUU (travel ban). La prohibición aplica sólo a funcionarios del gobierno venezolano.

    • Octubre 2017.  La empresa refinadora PBF Energy, quinto mayor importador estadounidense de crudo venezolano, suspende compras directas a PDVSA.

Canadá aprueba el proyecto de ley S-226 que le autoriza a imponer restricciones en materia de las transacciones de bienes y congelar los activos de funcionarios extranjeros.

La petrolera estadounidense NuStar Energy prohíbe a PDVSA el uso de un terminal de almacenamiento en el Caribe.

El Banco Deutsche Bank informa al banco Citic Bank de la República Popular China, el cierre de sus cuentas de corresponsalía, por procesar pagos de PDVSA.

    • Noviembre 2017. Colombia bloquea el despacho del tratamiento antimalárico (primaquina y cloroquina) solicitado al laboratorio BSN Medical en ese país.

Las transnacionales farmacéuticas Baster, Abbot y Pfizer se niegan a emitir certificados de exportación a medicamentos oncológicos imposibilitando la posibilidad de compra por parte de Venezuela.

EEUU sanciona e inhabilita a funcionarios venezolanos que administran los programas de provisión de alimentos, impidiéndoles firmar acuerdos comerciales o convenios internacionales que favorezcan la política alimentaria de Venezuela.

La Unión Europea prohíbe la venta de armamentos y equipos de seguridad a Venezuela.

El Banco Deutsche Bank principal corresponsal de Banco Central de Venezuela (BCV), cierra definitivamente las cuentas.

Un total de 23 operaciones financieras de Venezuela, destinadas a la compra de alimentos, insumos básicos y medicamentos por 39 millones de dólares, son devueltas por bancos internacionales.

La calificadora de riesgo Standard and Poor’s declara a Venezuela en “default selectivo”.

    • Diciembre 2017. Son bloqueados pagos venezolanos del servicio de cabotaje para el transporte de combustible, lo que origina escasez de este producto en varios estados.

Un total de 19 cuentas bancarias de Venezuela en el extranjero son cerradas arbitrariamente por bancos estadounidenses, impidiendo los pagos a los acreedores.

Son retenidos en el extranjero 471 mil cauchos para vehículos comprados en el exterior cuyos pagos fueron realizados.

    • Enero 2018. 11 bonos de deuda venezolana y de PDVSA, por un valor de 1.241 millones de dólares, no pudieron ser cancelados a sus acreedores por el obstáculo de las sanciones.

    • Febrero 2018. El Departamento del Tesoro de EEUU, amplía las sanciones financieras a Venezuela y empresas venezolanas establecidas en la Orden Ejecutiva 13808 de agosto de 2017. Impide la renegociación o reestructuración de deuda venezolana y de PDVSA, emitida con anterioridad al 25 de agosto de 2017.

    • Marzo 2018.

La Administración Trump:

            ▪  Renueva por un año la orden ejecutiva 13692

            ▪  Renueva la orden ejecutiva 13808 e impone 6 nuevas medidas coercitivas que atentan contra la estabilidad financiera de Venezuela, al prohibir la reestructuración de la deuda e impide la repatriación de los dividendos de Citgo Petroleum, empresa del Estado venezolano.

            ▪  Dicta la Orden Ejecutiva 13827 que prohíbe a cualquier ciudadano o institución efectuar transacciones financieras con la criptomoneda venezolana “Petro”.

El Gobierno de Panamá publica una lista de 55 ciudadanos venezolanos sancionados (incluyendo al Presidente Nicolás Maduro) y 16 empresas venezolanas consideradas de “alto riesgo”.

    • Abril 2018. Canciller de Perú, en el marco de la Cumbre de las Américas, y a nombre del Grupo de Lima, anuncia que han decidido crear un grupo de seguimiento para estudiar medidas políticas y económicas contra Venezuela. En la misma Cumbre, EEUU y Colombia  acuerdan acelerar mecanismos para perseguir las transacciones financieras de Venezuela y obstaculizar las líneas de suministro de productos básicos que requiere el país.

    • Mayo 2018. Reclamando un fallo favorable de un laudo arbitral por 2 mil 40 millones de dólares ante la Cámara de Comercio Internacional, la petrolera estadounidense Conoco Phillips anuncia que embargará activos internacionales de PDVSA.

Bloquean el pago de 9 millones de dólares destinados a la adquisición de insumos para diálisis, para el tratamiento de 15 mil pacientes de hemodiálisis.

El gobierno colombiano bloquea el envío a Venezuela de 400 mil kilos de alimentos del programa de subsidio alimentario de los Comités Locales de Abastecimiento y producción CLAP.

En represalia por la elección presidencial para el período 2019-2025, en la que votaron más de 9 millones de ciudadanos y Nicolás Maduro gana con el 67% de los votos, Donald Trump emite la Orden Ejecutiva 13835 en la que amplía las sanciones económicas contra Venezuela y mediante la cual prohíbe la compra de deuda y cuentas por pagar de empresas del Gobierno de Venezuela.

EEUU sanciona a 20 empresas de Venezuela por supuestos lazos con el narcotráfico.

    • Agosto 2018. EEUU autoriza a Crystallex para confiscar activos de Citgo Petroleum, propiedad de PDVSA.

El gobierno de Brasil dejó de pagar 40 millones de dólares que adeuda a la Corporación Eléctrica de Venezuela por suministro de energía al estado de Roraima. El canciller de Brasil, Aloysio Nunes, declaró que la deuda eléctrica “no ha sido cancelada por el bloqueo económico y financiero impuesto por EEUU y la Unión Europea contra Venezuela”.

    • Noviembre 2018. Donald Trump prohíbe a los ciudadanos estadounidenses comerciar con oro exportado desde el país sudamericano.11

    • Enero 2019. La administración de Donald Trump aprueba nuevas sanciones contra Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) que incluye el congelamiento de 7.000 millones de dólares en activos de la empresa filial CITGO, en adición a una pérdida estimada de 11.000 millones de dólares de sus exportaciones durante los próximos años.12

CÓMO HAN ATACADO A LA MONEDA13

Paralelamente a la aplicación de medidas coercitivas, bloqueos, sanciones y apropiación de activos, el imperialismo, ha estado atacando la moneda nacional, el bolívar, con el objetivo de inducir la inflación y afectar los niveles de producción nacional. Lo hace mediante la manipulación diaria del tipo de cambio a través de portales web cuyos dominios residen en territorio estadounidense, específicamente Miami.

Al manipular el tipo de cambio y cotizarlo a un valor mayor al oficial inciden sobre los precios de todos los bienes importados, los cuales, a su vez son requeridos para los procesos de producción. El aumento de los precios de los productos importados eleva todos los costos de producción y por consiguiente los precios de los bienes finales. Es lo que se conoce como un shock de oferta que se manifiesta en una estanflación, es decir, aumento de precios (inflación) con estancamiento o recesión económica.

Históricamente, los incrementos del tipo de cambio en Venezuela derivan en aumentos de los precios internos de la economía, lo que ocurre es que a partir del año 2013, dicho tipo de cambio ha estado siendo manipulado políticamente a través de portales web que residen en EEUU (ver gráfico 1).

Esta agresión contra la economía venezolana y por lo tanto contra el pueblo todo, tiene tres efectos: 1) deteriora el salario real; 2) contrae los niveles de producción; 3) hace insuficiente el gasto y la inversión públicos.

Desde el año 2013 hasta la fecha han manipulado el tipo de cambio 3500 millones por ciento. En 2013 lo cotizaban en 8,69 BsF/US$ y hoy lo publican en 350.000.000 BsF/US$ (ver gráfico 2).

Nada ha ocurrido en la economía venezolana que permita explicar esta supuesta depreciación de la moneda en tales magnitudes. Ha sido una manipulación del tipo de cambio que atiende a un patrón de comportamiento político asociado a momentos de alta conflictividad o de procesos electorales (gráfico 3).

Hemos estimado las pérdidas que ha ocasionado el ataque a la moneda sobre los niveles de producción nacional que sumadas a las ocasionadas por el bloqueo, las sanciones y las apropiación ilegal de nuestros activos dan muestra de la magnitud criminal de las medidas coercitivas unilaterales por parte del imperialismo contra el pueblo venezolano.


IMPACTO DE LA GUERRA ECONÓMICA CONTRA EL PUEBLO DE VENEZUELA

A 114.302 millones de dólares ascienden las pérdidas ocasionadas por las medidas coercitivas unilaterales que, desde el 2013 y hasta la fecha, EEUU ha impuesto al pueblo venezolano, incluyendo el ataque a la moneda nacional.

De estos 114.302 millones, 21.450 millones de pérdidas han sido ocasionadas por las medidas coercitivas unilaterales, los bloqueos financieros, los embargos comerciales, el robo de los activos de CITGO, los recursos que se dejan de percibir por tal acto de pillaje, el oro retenido en Inglaterra y los euros bloqueados en Euroclear.

La diferencia, es decir, 92.852 millones de dólares, corresponde a lo que hemos dejado de producir como consecuencia del ataque a la moneda, que además de inducir la inflación, también contrae los niveles de producción nacional.

Impacto de las medidas coercitivas unilaterales

En un escenario de estimación muy conservador, las pérdidas ocasionadas por las medidas coercitivas unilaterales ascienden a 21.450 millones de dólares hasta la fecha. Incluye:

    1) 11.000 millones de dólares de pérdidas por lo que se dejará de percibir debido a la apropiación ilegal de la empresa petrolera y venezolana CITGO por parte de EEUU.

2) 7.000 millones de dólares por la apropiación ilegal de los activos de CITGO.

3) 1.600 millones de dólares retenidos por Euroclear.

4) 1200 millones de dólares equivalente al oro retenido por el Banco de Inglaterra14.

5) 467 millones de dólares por el descenso del valor de los títulos valores en custodia en Euroclear, los cuales pasaron de USD 1.093.529.941,96 a 625,90MM, descendiendo 57,24% como consecuencia del bloqueo financiero15.

7) 37 millones de dólares16 por trabas operativas que vienen imponiendo las navieras y los puertos internacionales, como es el caso del roleo de la carga que tiene como destino a Venezuela y el aumento de los tiempos de espera; aunado al incremento de las tarifas17.

8) 655 mil dólares por transferencias, consultas de pagos, enmiendas de las transferencias, entre costos operativos. Antes de la aplicación de las sanciones estadounidenses, las instrucciones de pago eran enviadas a través de los bancos corresponsales y eran ejecutadas en 48 horas. Ahora en promedio, un pago se hace efectivo entre 10 y 20 días continuos18.

9) 20 millones de dólares por el diferencial cambiario al verse obligada la República a adoptar otras divisas, distintas al dólar americano, para realizar las transacciones financieras y comerciales19.

10) 264 millones de dólares por pérdida del bono adquirido a través de Credit Suisse correspondiente a la deuda pública externa20.

Se trata de estimaciones conservadoras por cuanto no incluyen por ejemplo, las pérdidas ocasionadas por la descomposición de alimentos o medicamentos retenidos más del tiempo previsto en los buques, o el costo adicional de transporte y trámites administrativos ocasionados por la necesidad de realizar triangulaciones en las compras y así evitar sanciones a empresas o países por parte de EEUU.

Impacto del ataque a la moneda

Entre las agresiones económicas no podemos dejar de considerar el ataque a la moneda por las afectaciones sobre el pueblo venezolano, las cuales no solo se limitan al deterioro del salario real producto de la hiperinflación inducida que dicho ataque ocasiona, sino que además tiene un efecto de contracción de la producción nacional y por lo tanto del consumo nacional. Este ataque proviene de páginas web cuyo dominio reside en EEUU, específicamente el portal web dolartoday.

Históricamente la producción nacional en Venezuela ha estado determinada en 96,6% por los niveles de exportación petrolera, durante los últimos 4 años, y particularmente desde el 2016 la venta del petróleo ha incidido solo en 60% sobre el producto interno bruto, el otro 40% está influenciado por el shock de oferta consecuencia del ataque a la moneda. En otras palabras, la caída del producto interno bruto que desde el año 2016 hemos registrado se debe, en 60% a la caída de las exportaciones petroleras, y en 40% al ataque a la moneda21.

Es por esta razón que, a pesar de la recuperación de las exportaciones petroleras en 2017 y 201822, debido principalmente al aumento del precio del hidrocarburo, el producto interno bruto no se recuperó, sino que mantuvo su tendencia descendente (ver gráfico 4). En condiciones normales, es decir, de no haber habido manipulación política del tipo de cambio, se hubiese esperado una recuperación del PIB al verse incrementadas las exportaciones. No ha sido el caso en 2017 y 2018.

En un escenario conservador, suponiendo condiciones normales, sin guerra económica, sin ataques al bolívar, con un precio promedio del barril de petróleo de 45 US$, y con niveles de exportación petrolera alrededor de US$ 37.000 millones23, lo que a su vez implica suponer que no hubiese habido un sabotaje en la industria petrolera24 y que los niveles de producción de hidrocarburos se mantuviesen similares al 2015, es decir, 2,9 millones de barriles diarios, el producto interno bruto debió ubicarse alrededor de US$ 131.000 millones, equivalentes a la del año 2015.

Al calcular la diferencia anual del producto interno bruto anual esperado, es decir, el del 201525, con lo efectivamente producido los años 2016, 2017 y 2018, se obtiene que, en total, durante esos 3 años se dejaron de producir US$ 92.852 millones.

De esa pérdida estimada en US$ 92.852 millones, la cual incluye los efectos del ataque a la moneda y del boicot silencioso a la industria petrolera, US$ 41.691 millones corresponden al ataque a la moneda.

Al sumar las pérdidas ocasionadas por las medidas coercitivas unilaterales y las relacionadas con los niveles de producción nacional debido al ataque a la moneda y al boicot a la producción petrolera, resulta una pérdida total de 113.652 millones de dólares.

IMPACTO DE LA GUERRA ECONÓMICA SOBRE EL PUEBLO VENEZOLANO

Para el tamaño de la economía venezolana, esta cifra representa un poco menos de la producción nacional de todo un año con un precio de US$ 45 el barril de petróleo. El producto interno bruto del año 2015 ascendió a US 131.626 millones26.

Estos 114.302 millones de dólares equivalen también a la importación de medicamentos y alimentos para abastecer a los 30 millones de venezolanos durante 26 años. Por ejemplo, el año 2004 en el que no se registró escasez de comida la importación, incluyendo la materia prima para la producción, fue US$ 2.160 millones27. En el caso de los medicamentos, la importación ascendió a US$ 2.259 millones28. Es decir, con US$ 4.300 millones al año se cubren las importaciones y se abastece de insumos, materias primas y productos finales para alimentos y medicamentos a toda la población.

Las pérdidas que hasta la fecha han ocasionado las sanciones, el bloqueo y el ataque a la moneda coinciden con la inversión en salud para 10 años tomando en cuenta que ésta representa alrededor del 10% del producto interno bruto anual. En otras palabras equivalen a la garantía de prestar el servicio de salud hospitalario, ambulatorio, preventivo, tanto del sector público como privado, a todos los venezolanos durante 10 años.

Representan garantizar el derecho a la educación durante 10 años, tanto pública como privada, desde prescolar hasta universitaria. La inversión en educación representa el 10% del producto interno bruto anual.

Estas pérdidas representan las importaciones totales anuales para 7 años y medio, incluyendo maquinarias, repuestos, transporte, materias primas, insumos, alimentos y medicamentos, textiles, productos de la industria química, etc. Por ejemplo, el año 2004, en el que no hubo desabastecimiento, las importaciones anuales sumaron 15.161 millones de dólares29.

Corresponden a la deuda externa total de la República, la cual debemos pagar en un plazo de 20 años.

Para que tengamos otras referencias y podamos reconocer la magnitud del ataque criminal y genocida sufrido por el pueblo venezolano ofrecemos otros indicadores30:

    • Con los 1.200 millones de dólares que Inglaterra nos tiene retenidos en oro se adquieren los alimentos para 6 millones de hogares por 6 meses.

    • Solo con 20 millones de dólares se cubre la atención y el tratamiento para 3 años a todas las personas con malaria.

    • Con 40 millones de dólares se procura el tratamiento antirretroviral para personas con VIH y con Sida durante 2 años.

    • Con 18 millones de dólares adquirimos las 9 millones de dosis de vacunas para aplicar el plan de vacunación anual31.

    • Con los 11.000 millones de dólares que representan las pérdidas por el acto de pillaje contra CITGO, importamos todas las medicinas y material médico quirúrgico incluyendo los insumos para la producción interna durante 5 años32.

Cada número aquí presentado corresponde al rostro de una mujer, un hombre, un niño, una niña venezolanos. No se trata solo del impacto económico sobre las importaciones o la producción, se trata del impacto que estas agresiones económicas tienen sobre la garantía de los derechos humanos de cada venezolano.

Estas agresiones afectan de manera masiva y sistemática a toda la población, tanto civil como militar.

No obstante, debemos precisar que Venezuela no se encuentra en una situación de crisis humanitaria. Sin desconocer las dificultades para la adquisición de alimentos y medicamentos que estas agresiones han ocasionado, en el país se desarrollan actividades rutinarias laborales, educacionales, recreativas con normalidad.

A pesar del ataque criminal contra el pueblo de Venezuela, los últimos 6 años se han construido más de 2,5 millones de viviendas, no se ha cerrado un solo hospital o una escuela, las empresas de alimentos y medicamentos siguen operando en nuestro territorio.

Venezuela sigue ocupando el primer lugar como país menos desigual de América Latina según cifras de la CEPAL.

Son indicadores que muestran que a pesar de las dificultades causadas por la guerra económica, Venezuela no se encuentra en situación de crisis humanitaria, por lo tanto no requiere ayuda humanitaria.

Los venezolanos requerimos que cesen las agresiones, que se levanten las sanciones y el bloqueo y que detengan el ataque a nuestra moneda.

GUERRA ECONÓMICA: CRIMEN DE LESA HUMANIDAD


El bloquear financiera y económicamente a un país, propiciar un embargo comercial, retener sus divisas, apropiarse de sus activos y atacar su moneda no solo violan toda normativa internacional, sino que además constituyen crímenes de lesa humanidad según la definición dada por el Estatuto de Roma.

Alfred de Zayas, experto independiente sobre la promoción de un orden internacional democrático y equitativo de la ONU visitó Venezuela en noviembre de 2017, se reunió con todos los sectores de la sociedad y elaboró un informe en el que afirma que “[l]a solución de la «crisis» venezolana radica en las negociaciones de buena fe entre el gobierno y la oposición, el fin de la guerra económica y el levantamiento de las sanciones”33.

De Zayas sugirió a los Estados Partes en el Estatuto de Roma “reconocer los crímenes geopolíticos, entre éstos las medidas coercitivas unilaterales y las manipulaciones monetarias que inducen hiperinflación, como crímenes de lesa humanidad”34. Plantea que “la guerra económica, los embargos, los bloqueos financieros y los regímenes de sanciones equivalen a crímenes geopolíticos y de lesa humanidad en virtud del artículo 7 del Estatuto de la Corte Penal Internacional” 35 por cometerse como parte de un ataque generalizado y sistemático contra una población civil y con conocimiento de dicho ataque.

Estas agresiones económicas que el imperialismo ha puesto en práctica cada vez que se siente amenazado con la posibilidad de que se consolide un modelo de justicia social, de igualdad, que garantice los derechos humanos a toda la población, trascienden en tiempo y espacio las fronteras venezolanas. Ocurrió con el proyecto socialista de Salvador Allende en Chile entre 1970 y 1973, o el de la revolución sandinista en Nicaragua en los 80, o en cuba de la década de los 60 hasta nuestros días.

Lo dijo Allende en su discurso ante la Asamblea de la ONU el 04 de diciembre de 1972, en el que denunció que su país estaba siendo agredido, discurso que, por cierto, pocos creyeron:

“El portavoz del Grupo Africano declaró, que su Grupo se solidarizaba plenamente con Chile porque no se trataba de una cuestión que afectara sólo a una nación, sino que potencialmente a todo el mundo en desarrollo. Esas palabras tienen un gran valor, porque significan el reconocimiento de todo un Continente, de que a través del caso chileno está planteada una nueva etapa de la batalla entre el imperialismo y los países débiles del Tercer Mundo.”(subrayado nuestro)

Es hora de que estas acciones coercitivas del imperialismo sean no solo develadas y denunciadas ante el mundo, sino además reconocidas como crímenes de lesa humanidad.

Los venezolanos no necesitamos ayuda humanitaria, lo que reclamamos es justicia para impedir la impunidad de declaraciones como las ofrecidas por el portavoz del Departamento de Estado de EEUU quien dijo al abordar la efectividad de las medidas coercitivas unilaterales: “La campaña de presión contra Venezuela está funcionando. Las sanciones financieras que hemos impuesto (…)  han obligado al Gobierno a comenzar a caer en default, tanto en la deuda soberana como en la deuda de PDVSA, su compañía petrolera. Y lo que estamos viendo (…) es un colapso económico total en Venezuela. Entonces nuestra política funciona, nuestra estrategia funciona y la mantendremos”36.

Reconocer las medidas coercitivas unilaterales y el ataque a la moneda como crímenes de lesa humanidad sería un paso importante para la estabilidad y la Paz mundial.

En este aspecto, la ONU tiene, desde hace décadas, una gran deuda.

 

13 de marzo de 2019


Informe realizado a solicitud de FUNDALATIN en el marco de la 40° Sesión del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas y de la visita de la Comisión Técnica enviada a Venezuela por la Alta Comisionada para los Derechos Humanos Michelle Bachelet.

Por: Pascualina Cursio

Duque acosado por una agenda social y política que no da tregua en Colombia, con problemas serios de gobernabilidad derivados de su relación con los partidos políticos que aún con su declarado apoyo insisten en que se les de representación política en el gabinete ministerial; con su partido, el Centro Democrático, que no solo se muestra insaciable en la burocracia diplomática y en los altos cargos del Estado y con una política de seguridad que pretende reeditar la estrategia de seguridad democrática de Uribe implementada en sus largos ocho años de gobierno, decidió jugar en la primera línea de fuego para buscar a toda costa la salida de Nicolás Maduro del gobierno de Venezuela y convertir esta política en parte de su agenda prioritaria tratando de convertir la crisis venezolana en el primer tema de la agenda colombiana.

Esta estrategia le ha salido a medias. Juntando el tema de la crisis de Venezuela al atentado del Ejército de Liberación Nacional el pasado 17 de enero en la ciudad de Bogotá, Duque abiertamente se echó en manos del Centro Democrático y de su mentor Álvaro Uribe que por supuesto evalúa que Duque ha “enderezado” su gobierno como se lo exigía públicamente y a cambio de su irrestricto apoyo le exige a Duque acentuar sus políticas de saboteo a los Acuerdos de La Habana y el debilitamiento de las políticas y de las inversiones económicas desprendidas del Acuerdo firmado en noviembre de 2016 en el Teatro Colón de Bogotá entre el Estado Colombiano y las FARC-EP.

Foto: carlosagaton.blogspot.com

La propuesta de EEUU y sus cómplices sudamericanos, Colombia y Brasil, bajo los auspicios del Grupo de Lima, de promover una caravana humanitaria en Venezuela supone una flagrante vulneración del principio humanitario de neutralidad y soberanía, mientras algunos analistas alertan sobre una posible guerra en toda la Cuenca del Caribe, ya que Nicaragua y Haití también ‎están siendo desestabilizados. ‎Esa guerra será impuesta desde el exterior, dice el analista francés Thierry Meyssan. Su objetivo ya no será derrocar gobiernos de ‎izquierda para reemplazarlos por los partidos de derecha, ya que en el desarrollo de los acontecimientos se perderán las distinciones entre esos bandos. Poco ‎a poco, todos los sectores de la sociedad se verán amenazados, sin distinción de ideología ni de ‎clase social. ‎

La propuesta de establecer corredores humanitarios entre Colombia y Venezuela sitúa a las Fuerzas Armadas venezolanas en la tesitura de impedir o aceptar la llegada de alimentos y medicinas al país, lo que es una flagrante instrumentalización de la acción humanitaria, la cual está siendo utilizada como mecanismo de presión política para solucionar el problema de fondo en Venezuela a medida de los deseos e intereses del gobierno estadounidense.

Incluso suponiendo que una parte de las Fuerzas Armadas Bolivarianas diesen vía libre a la entrada de esos bienes en el país, resulta difícil vislumbrar cómo, dónde y con qué criterios se canalizaría esta asistencia.

"El llamado de un Estado extranjero a las Fuerzas Armadas de otra nación a cambiar su postura y, de hecho, traicionar su juramento, es una injerencia inaudita en los asuntos de un país", afirmó este lunes el director de la cancillería rusa para América Latina, Alexandr Schetinin, quien aseveró que Venezuela no pidió ayuda militar a Rusia ante la crisis política que sufre.

Si para entablar un diálogo "es necesaria la asistencia internacional, la apoyamos, justo por ello saludamos la iniciativa de México, Uruguay y los países de la Comunidad del Caribe, pero estamos convencidos de que el diálogo no debe buscar una suerte de capitulación, sino que debe centrarse en la reconciliación y la salida de la crisis en interés de ese país soberano y los propios venezolanos", sostuvo.

Meyssan sostiene que los demás países de la región no podrán mantenerse al margen para escapar a una guerra que se desarrollaría en etapas, como sucedió en la región africana de los Grandes Lagos y en Medio Oriente, y significaría la destrucción de los símbolos del Estado moderno, con ataques ‎contra la conciencia colectiva y la memoria de Hugo Chávez.

Ya son habituales las tentativas de introducción de armas y el financiamiento para la organización de “manifestaciones” que acaban ‎en actos de violencia que la prensa hegemónica atribuye sistemáticamente al gobierno (el terror callejero opositor de 2014 y 2017 causó más de 200 muertos).

Para Meyssan, la tercera etapa serán sangrientos atentados por todo el país, esquema que EEUU ya utilizó con éxito contra Libia y Siria y el envío posterior de mercenarios extranjeros (130 mil enviados a Irak y Siria).

 

Chomsky: es el imperio

El concepto de ayuda humanitaria como alternativa de la política es casi todo acto agresivo realizado por cualquier potencia que, desde el punto de vista del agresor es una ayuda humanitaria, pero no desde el punto de vista de las víctimas, explica el filósofo, lingüista y politólogo estadounidense Noam Chomsky. EEUU lo reconoce públicamente y se entiende en el terreno del imperio tradicional, añade.

Chomsky pone en el tapete varios ejemplos de “ayuda humanitaria”, como los bombardeos estadounidenses a Serbia en 1999 (con saldo de dos mil muertos)  y Libia en 2011 (dejando 10 mil muertos). Y asevera que la sociedad debe repensar lo que significa el poder.

Estados Unidos, a su juicio, sigue siendo el poder supremo. Su poder es dañino, pero desde el punto de vista de la oligarquía, ese poder les da todo lo que piden, asevera el filósofo. Solo en términos militares, esta nación maneja el 25% de la economía mundial, y también está mucho más avanzado en tecnología que el resto del mundo.

Agrega que pese a que en economía han estado en declive, sería un error pensar en que han perdido su dominio. “La multinacionales estadounidenses son dueñas de la mitad del mundo, están integradas con el Estado, tienen todos los sectores: industria, venta, comercio, finanzas”. Explica que desde su elección como presidente, no solo es Trump quien representa el peligro, sino el liderazgo republicano completo, que niega el fenómeno del calentamiento global, por mencionar solo un problema.

Según Chomsky, las políticas más peligrosas apenas se discuten, “son amenazas existenciales que enfrentamos, esta generación tiene que decidir si la existencia humana continuará, no es un

Hay varias formas de capturar un territorio con las mayores reservas de petróleo y la más confortable sería la imposición de un gobierno –una dictadura tecnocrática, al ejemplo saudí-  que proteja los intereses de la potencia hegemónica.

Pero pasa el tiempo y Washington muestra nerviosismo, como la sugerencia de John Bolton de recluir al presidente Nicolás Maduro en Guantánamo  o la insistencia de Donald Trump en una “invasión”, que si bien satisface a su claque interna, incomoda a sus socios europeos.

El portugués Francisco Louca señala que aún les falta “descubrir” las armas de destrucción masiva en Venezuela o inventar algún incidente sangriento que justifique su accionar. No olvida el analista que después del golpe contra el presidente chileno Salvador Allende, China y el Vaticano fueron los primeros estados en reconocer al dictador Augusto Pinochet, mientras los presos políticos eran fusilados en el Estadio Nacional.

Cruz Roja no participa

Mientras en Colombia se habla de la llegada de la “ayuda humanitaria” a la ciudad de Cúcuta, fronteriza con Venezuela, el jefe de la delegación del Comité Internacional de la Cruz Roja en Colombia, Christophe Harnisch, afirmó que esa institución no participará en la distribución de la asistencia que llegará desde EEUU, al considerar que es ayuda de un Gobierno y no es humanitaria.

“Nosotros no participamos en lo que no es para nosotros una ayuda humanitaria”, puntualizó el jefe del CICR en Colombia. “Hablamos de una ayuda que un gobierno decide”, puntualizó Harnisch y acotó que para el CICR el término  “humanitario” debe ser protegido por los principios fundamentales  de esa organización como son la independencia, la  imparcialidad y la neutralidad.

Según lo dispuso la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en sendas resoluciones de 1991 y 2006, humanidad, imparcialidad, neutralidad e independencia operativa son los cuatro principios que deben estar presentes en las acciones de ayuda internacional para que sean calificadas de humanitarias.

En la práctica, cuando la ayuda está dirigida a estados donde ha habido o hay un conflicto de proporciones (Kosovo, Irak, Libia y Somalia son buenos ejemplos de 1999 hasta hoy), las naciones ricas, con EEUU en primer lugar, se encargan de convertir lo que debía ser un acto de solidaridad en uno impúdicamente propagandístico.

Venezuela atraviesa por una severa crisis política, no humanitaria. Ésta última se define como una situación de emergencia generalizada que exige ayuda masiva, sin la cual podría convertirse en catástrofe. La ayuda propuesta por Trump y sus cómplices parece más producto de una preocupación por el reconocimiento de un gobierno autoproclamado que garantizaría el asalto a sus riquezas naturales, que el interés por el destino del pueblo venezolano.

 

Comida deshidratada

Foto: http://www.resumenlatinoamericano.org/2019/02/10/venezuela-la-ayuda-humanitaria-consistira-en-comida-deshidratada-revelan-periodistas-opositores/

El programa “El Citizen”, que conduce el opositor experiodista y exdiplomático venezolano Leopoldo Castillo en una televisora de Miami, mostró los presuntos paquetes de “ayuda humanitaria” que el gobierno estadounidense dice que entregará a 20 mil venezolanos, como parte de un show para justificar una intervención militar disfrazada de “ayuda humanitaria” a Venezuela.

Se trata de paquetes de comida deshidratada “con un contenido calórico de 2.500 calorías, lo suficiente para subsistir por un día”. Son entregados por la USAID (Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional), institución financiada por el Departamento de Estado norteamericano.

El anuncio desilusionó a muchos venezolanos opositores al gobierno, residentes en el sur de EEUU, quienes esperaban un “Clap mejorado” u otro tipo de alimentos más tradicionales. Los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap) garantizan en Venezuela la distribución de alimentos. Las propias comunidades abastecen y distribuyen los alimentos prioritarios a través de una modalidad de entrega de productos casa por casa.

Se presentan con colores marrón o anaranjado, espaguetis disecados con carne y salsa. “Esta bolsa viene con una serie de químicos, que tú le echas agua al químico y calienta la comida en cuestión de segundos. Trae algunos dulces, una bolsita con una salsa para la pasta, agua de emergencia, y puede conservarse cinco años sin refrigerarse. También trae una barra de proteínas con seis porciones, señaló el “investigador” del programa, Casto Ocando.

 

Mirko  C. Trudeau

Economista-jefe del Observatorio de Estudios Macroeconómicos (Nueva York), Analista de temas de EEUU y Europa, asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, estrategia.la). Traducción de CLAE.

-- http://estrategia.la/2019/02/12/entre-el-caballo-de-troya-humanitario-y-una-eventual-guerra-en-la-cuenca-del-caribe/

https://www.alainet.org/es/articulo/198094

La pregunta que me hago, y seguro que no soy el único, es si la criminal, descarada y patética política de Estados Unidos y sus aliados para derrocar el gobierno bolivariano de Nicolás Maduro en Venezuela y reemplazarlo con el títere Juan Guaidó, no es una prueba más de la acelerada e irremediable decadencia del sistema imperial y del capitalismo realmente existente, de su creciente pérdida de poder económico e influencia política, diplomática, y del poder de fascinación de su tan mentado “soft-power” a nivel mundial, y particularmente en las regiones estratégicas del Oriente Medio, Asia, África y hasta en Europa, todo esto después de haber alcanzado en la última década del siglo 20 y la primera década del 21, mediante el “orden” mundial neoliberal y gracias al derrumbe de la Unión Soviética, la formación de un sistema unipolar que impuso el control de Washington en prácticamente todas las ramas de las relaciones internacionales, un paso hacia el anhelado “poder supremo mundial”, algo que dicho sea de paso ningún imperio pudo jamás realizar.

Lo anterior no es una valoración personal, sino conclusiones de la Estrategia de Seguridad Nacional (ESN) de Estados Unidos presentada a finales del 2017 (1), que como recuerda Augusto Zamora (2) fue reiterada en los recientes documentos oficiales de noviembre de 2018, donde se plantea que "la seguridad y el bienestar de Estados Unidos están en mayor riesgo que en cualquier otro momento en décadas. La superioridad militar de Estados Unidos, el poder duro de su influencia global y su seguridad nacional, se ha erosionado en grado peligroso. Los rivales y adversarios están desafiando a Estados Unidos en muchos frentes y en muchos dominios. La capacidad de Estados Unidos para defender a sus aliados, sus socios y sus propios intereses vitales está cada vez más en duda. Si el país no actúa rápidamente para remediar estas circunstancias, las consecuencias serán graves y duraderas".

Los actos para recuperar la perdida hegemonía de Washington nos acercan cada día más a un desenlace potencialmente apocalíptico. En lo que va de su mandato el presidente Donald Trump puso en crisis, se retiró y en efecto anuló la competencia de la mayoría de las instancias internacionales creadas a partir del final de la Segunda Guerra Mundial, y de casi todos los acuerdos para el control de los armamentos nucleares. A comienzos de febrero el presidente ruso Vladimir Putin lo puso en claro cuando acusó a Estados Unidos (EEUU) de “demoler” la seguridad global al suspender sus obligaciones bajo el Tratado con Rusia sobre las Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF en su sigla en inglés), añadiendo que Rusia tomaría “respuestas similares” y que de ahora en adelante “proseguiremos el desarrollo de misiles previamente prohibidos” bajo los términos del INF.

Un editorial del diario mexicano La Jornada apuntaba, el pasado 4 de febrero, que “ante la imposibilidad de emprender nuevas aventuras de rapiña colonial en Levante y en Asia Oriental, Estados Unidos considera a Venezuela como la presa ideal: se trata de un país cercano, poseedor de inmensas riquezas petroleras y de abundantes recursos naturales. Adicionalmente, tras el colapso de los gobiernos progresistas en la mayor parte de Sudamérica, el gobierno de Caracas se encuentra en una situación de aislamiento, sin más apoyos regionales significativos que los de Cuba y Bolivia y sin más espacios diplomáticos que la neutralidad ofrecida por México y Uruguay para buscar una solución pacífica y negociada a su crisis política interna” (3). Y por su parte el periodista e investigador Aram Aharonian señala que “las metas de EEUU son retomar el control de los inmensos recursos naturales de Venezuela y también demostrar al mundo que todavía puede atacar un pequeño país y demostrar al mundo que EEUU habla en serio. Pero pocos toman en serio a los militares estadounidenses: desde hace décadas no han sido capaces de derrotar (salvo en las películas o en las series de televisión, claro) a ningún país decidido a resistir su agresión” (4).

Los pueblos “centrales” tan explotados y desamparados como los pueblos de la periferia

La peligrosidad de la decadencia del imperialismo estadounidense es un tema que abordó el antropólogo canadiense Maximilian C. Forte (5), para quien la “incapacidad de gobernar, combinada con una sobre-extensión insostenible, el aumento de la deuda y del gasto militar, con millones (de sus habitantes) que continúan en la pobreza, la obsesión por los escándalos sexuales y una amenaza de Apocalipsis auto-infligido no es como los imperios en su apogeo jamás han sido descritos”.

El antropólogo canadiense resume las condiciones externas (las “cabezas de playa”) que permiten alcanzar y mantener el poder imperial, y que en el plano geopolítico han dejado o están dejando de existir. Podemos añadir que en lo interno y para concitar el apoyo de sus pueblos los imperios tuvieron que distribuir una parte de la “renta imperialista” proveniente del saqueo y la explotación de los pueblos avasallados, sea mediante obras públicas, ventajas sociales y salariales, demostración de superioridad social y cultural (que alimentaba el necesario racismo), de poder y riqueza que justificase la explotación del “otro”, de los “otros” pueblos sometidos, como la “misión civilizadora” en el caso del imperio británico, y un sistema político y social estable.

La justificación del imperio de EEUU ha sido y sigue siendo que es el “país indispensable” por su “destino manifiesto” para hacer que la ley estadounidense prevalezca en las relaciones de los estadounidenses con el mundo, como señalaba el historiador Eric Hobsbawm, quien hace casi dos décadas planteaba que si EEUU no retiene la lección de la decadencia y fin del imperio británico, de adaptarse fácilmente a las “derrotas políticas”, e intenta mantener una posición que se erosiona apoyándose en la fuerza político-militar, “engendrará no el orden mundial sino el desorden, no la paz mundial sino la guerra, no el avance de la civilización sino la barbarie” (6).

Pero lo que actualmente vemos, desde la aplicación del capitalismo neoliberal en las sociedades imperiales, es que no solamente los pueblos de los países centrales del imperio ya no reciben parte de la renta imperialista, sino que son cada vez más explotados en sus trabajos, en sus vidas privadas (con el sistema de recolección de datos personales de Facebook, Google y otras firmas), porque los salarios bajan y ya casi no hay empleos estables. En síntesis, que la precariedad y el desempleo se expanden junto con el empobrecimiento y el endeudamiento de las familias, y que estos pueblos del imperio comienzan a estar tan desamparados como desde hace mucho tiempo lo han estado los pueblos de la periferia imperial.

En realidad las sociedades de los países que conforman el imperio dirigido por EEUU –el “eje anglosajón con el Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda, mas Japón y la mayoría de países de la Unión Europea-, están fracturadas por una creciente y ya enorme desigualdad en los ingresos, por el desempleo y el empleo precario, por la destrucción del tejido social y la exclusión económica que se manifiesta en un sentimiento de desamparo –expresado por los “chalecos amarillos” en Francia-, por el impase político, social y económico al que condujo este sistema de “soberanía del mercado”, que señala Hobsbawm “no es un complemento a la democracia liberal, sino más bien una alternativa a toda forma de organización política (…) la participación al mercado reemplaza la participación política; el consumidor reemplaza al ciudadano” (7), y la soberanía del consumidor substituye a la soberanía nacional y popular.

Hobsbawm también apuntaba que el vaciamiento de la democracia “explica la creciente mediocridad intelectual del discurso político”, que hoy día se ha convertido en una abrumadora irracionalidad. En efecto esta “declinación imperial que promete no decepcionar”, según el antropólogo Forte, se manifiesta en el increíble nivel de estupidez (y en algunos casos de serias sicopatologías, como señalan algunos sicólogos), en la irracionalidad, incapacidad o desinterés de la clase gobernante y de los monopolios que controlan las economías de estos países para tratar de solucionar la acelerada fragmentación social causada por las políticas neoliberales y los problemas de gobernabilidad mundial.

En este contexto la actual política de EEUU y de sus más fieles aliados (como el caso de Israel) es la de sembrar el caos a diestra y siniestra con impunidad, mediante ataques, cercos militares, persecuciones y sanciones de todo tipo (en el caso de Rusia, Irán, Siria, Venezuela y otros países), con amenazas militares y una guerra comercial y tecnológica (con China), con torceduras de brazos para avasallar a gobiernos aliados que necesitan mantener lazos comerciales con Irán (los de la Unión Europea), y conjurando a la luz del día para resucitar la “Doctrina Monroe”, como planteó Alberto Betancourt Posada en La Jornada de México (8), para tratar de que Nuestra América sea efectivamente el “patio trasero”, la propiedad exclusiva de EEUU, y esto no lo decimos los periodistas sino el diario Wall Street Journal que se hace eco de funcionarios de Washington : “al intentar forzar la salida del Presidente de Venezuela la administración Trump marca el comienzo de una nueva estrategia para que EEUU ejerza mayor influencia sobre América Latina, según funcionarios de la administración” (9).

De lo que se trata es de poner definitivamente fin a las soberanías nacionales y populares de los países de Nuestra América, para que acepten sin chistar el “nuevo orden” dictado por Washington y así apropiarse de los preciosos recursos de nuestras naciones. La Unión Europea (UE) y el Parlamento Europeo comparten esta política, como demuestra la posición que asumieron en el caso venezolano, lo que no sorprende porque ese sistema supranacional y profundamente neoliberal tiene como principio la eliminación de las soberanías nacionales y populares de los países miembros, como ya comprobaron los griegos e italianos.

Cabe destacar el caso canadiense, que por formar parte de la “moribunda” OEA, como dice Aharonian, y del Grupo de Lima, amerita mucha atención ya que fue la ministra canadiense de “Asuntos Globales” Chrystia Freeland quien (como acertadamente dijo un amigo profesor de Relaciones Internacionales en Montreal) al hablar con Juan Guaidó para congratularlo por la unificación de las fuerzas de oposición en Venezuela, dos semanas antes de que él se declarase presidente interino, comenzó a jugar en Venezuela el papel subversivo de la ex subsecretaria de Estado de EEUU, Victoria Nuland, en el “Maidán” para derrocar el gobierno constitucional de Víktor Yanukóvich en Ucrania en el 2014 (10). Vaya uno a saber si todo se resume a que la ministra está apoyando importantes intereses mineros (como la aurífera Cristallex) que vienen actuando desde hace más de dos décadas para apoderarse de grandes yacimientos auríferos en Venezuela. Pero lo cierto, como han destacado analistas canadienses, es que el gobierno Liberal de Justin Trudeau se ha convertido en un fiel aliado de Washington en sus políticas contra China –en el caso de la firma china Huawei-, contra Rusia –en todo momento y por no importa qué- y ahora contra Venezuela.

En realidad la búsqueda demencial de salir de la decadencia instaurando por la fuerza un imperialismo puro y duro está muy bien descrita en la ESN divulgada a finales del 2017 y en la Estrategia de Defensa Nacional dada a conocer a comienzos del 2018, en las cuales se plantea que las políticas propuestas restablecerá “la posición de ventaja de Estados Unidos en el mundo y afianzará las extraordinarias fortalezas de nuestro país () Reconstruiremos la fortaleza militar estadounidense para asegurar que no haya otra mayor () Nos aseguraremos de que el equilibrio de poder siga favoreciendo a los Estados Unidos en regiones claves del mundo: el Indopacífico, Europa y Medio Oriente (11).

Y como decíamos hace un año (12), si el hemisferio latinoamericano no aparece entre “las regiones claves del mundo” de la ESN, quizás sea porque desde la presidencia de Barack Obama, Washington y sus aliados locales venían actuando con diversas excusas para mantener y profundizar la derechización y avasallamiento, sea mediante “golpes de Estado suaves”, en Honduras, o como el contubernio jurídico-mediático en Brasil que destituyó a Dilma Rousseff, permitió encarcelar a Lula y facilitó el triunfo electoral de Bolsonaro. O los fraudes electorales como (de nuevo) en Honduras, o poniendo fin –como vemos en países latinoamericanos que promueven el golpe de Estado en Venezuela- a la “democracia liberal” e instaurando el Estado de excepción a conveniencia, con la persecución judicial de los líderes de la oposición –como el caso de Cristina Kirchner en Argentina-, y emitiendo decretos del Ejecutivo en serie para evitar la oposición de las legislaturas.

Lo que es claro es que con el equipo de neoconservadores que rodea a Donald Trump ya no hay necesidad de buscar explicaciones ni excusas, ya que ellos mismos declaran el interés económico de derrocar el gobierno constitucional de Venezuela, o sea el de apropiarse del petróleo y demás riquezas minerales de ese país. Como escribe el economista Michael Hudson “el fin del indisputado dominio económico global por EEUU ha llegado a su final antes de lo esperado, gracias a los mismos neoconservadores que dieron al mundo las guerras de Irak, Siria y las guerras sucias en Latinoamérica”, y apunta que las amenazantes políticas de EEUU están llevando a que países de Europa y de otras regiones busquen “crear sus propias alternativas en cuestión de instituciones financieras”, y que aun cuando esta situación viene construyéndose desde hace algún tiempo, lo que nadie pudo haber pensado “es que Donald Trump devendría el agente catalizador” de lo que ningún partido de izquierda ni líder nacionalista extranjero podría haber logrado, “la ruptura del Imperio Estadounidense”, y hacer que los países se defiendan buscando desmantelar el orden mundial centrado en EEUU (13).

Hudson enfatiza que los neoconservadores que Trump designó para las relaciones internacionales y la seguridad nacional “han logrado algo que parecía impensable no hace mucho tiempo”, como hacer que China y Rusia se unan –la gran pesadilla de Henry Kissinger y Zbigniew Brzezinski-, y conducir Alemania y a otros países europeos hacia la órbita euroasiática, la pesadilla de Halford Mackinder en el siglo 20.

Pero precisamente porque está en plena decadencia a nivel mundial el imperialismo estadounidense es más peligroso que nunca antes para nuestra región. Ningún país está a salvo, ningún pueblo al abrigo, y por eso mismo los pueblos de Nuestra América deben salir ahora a defender la independencia, la soberanía nacional y popular de la amenazada Venezuela bolivariana, porque así defenderán su independencia duramente ganada en luchas anticolonialistas y antiimperialistas del pasado.

 

- Alberto Rabilotta es periodista argentino-canadiense.

 

1.-Resúmen en español de la ESN: https://www.voanoticias.com/a/eeuu-trump-seguridad-nacional-/4167348.html

 Texto completo en inglés: https://www.whitehouse.gov/wp-content/uploads/2017/12/NSS-Final-12-18-2017-0905.pdf

 2.- Augusto Zamora, EEUU realinea a Latinoamérica viendo a China y Rusia, Rebelión : http://www.rebelion.org/noticia.php?id=252141

 3.- EU: Reorientación estratégica, La Jornada https://www.jornada.com.mx/2019/02/04/edito

 4.- Aram Aharonian, Un presidente-peón virtual, un poder real en Washington y el hundimiento de la OEA

 https://www.alainet.org/es/articulo/197977?utm_source=email&utm_campaign=alai-amlatina

 5- Maximilian C. Forte, What Happened to the American Empire? Enero de 2018

 https://zeroanthropology.net/2018/01/11/what-happened-to-the-american-empire/

 Incapacitated governance, combined with unsustainable over-reach, increased debt, increased military spending, continued poverty for millions, an obsession with sex scandals, and a threat of self-inflicted apocalypse is not how empires at their high point have ever been described.

 

 6.- Eric Hobsbawm “Pourquoi l’hégémonie Américaine diffère-t-elle… », pags. 79-80 del libro L’Empire, la démocratie, le terrorisme”, colección de textos publicados por André Versaille éditeur, Le Monde Diplomatique

 7.- Ídem Hobsbawm, citas de “Les Perspectives de la Démocratie”, páginas 109 a 111 del mismo libro.

 8.- Alberto Betancourt Posadas, Una Conspiración contra la democracia, La Jornada https://www.jornada.com.mx/2019/02/03/opinion/018a1mun

 9.- The Trump administration’s attempt to force out the president of Venezuela marked the opening of a new strategy to exert greater U.S. influence over Latin America, according to administration officials

 

 https://www.wsj.com/articles/u-s-push-to-oust-venezuelas-maduro-marks-first-shot-in-plan-to-reshape-latin-america-11548888252

 

 10.- Chrystia Freelan “spoke with Juan Guaido to congratulate him on unifying opposition forces in Venezuela, two weeks before he declared himself interim president.” https://www.theglobeandmail.com/politics/article-freeland-spoke-to-venezuelan-opposition-leader-two-weeks-before-he/ ; Victoria Nuland: https://www.bbc.com/news/world-europe-26079957 y http://www.informationclearinghouse.info/article37599.htm

 

 11.-Resúmen en español de la ESN: https://www.voanoticias.com/a/eeuu-trump-seguridad-nacional-/4167348.html ; Texto completo en inglés: https://www.whitehouse.gov/wp-content/uploads/2017/12/NSS-Final-12-18-2017-0905.pdf

 12.- 2017, año del imperialismo sin tapujos. ¿Y el 2018? (I) https://www.alainet.org/es/articulo/190104

 13.- Michael Hudson, Trump brilliant strategy to dismember US dollar hegemony: https://michael-hudson.com/2019/02/trumps-brilliant-strategy-to-dismember-u-s-dollar-hegemony/

 

 This break has been building for quite some time, and was bound to occur. But who would have thought that Donald Trump would become the catalytic agent? No left-wing party, no socialist, anarchist or foreign nationalist leader anywhere in the world could have achieved what he is doing to break up the American Empire. The Deep State is reacting with shock at how this right-wing real estate grifter has been able to drive other countries to defend themselves by dismantling the U.S.-centered world order. The Neocons who Trump has appointed are accomplishing what seemed unthinkable not long ago: Driving China and Russia together – the great nightmare of Henry Kissinger and Zbigniew Brzezinski. They also are driving Germany and other European countries into the Eurasian orbit, the “Heartland” nightmare of Halford Mackinder a century ago.

 

 

Fuente autorizada: https://www.alainet.org/es/articulo/198001?utm_source=email&utm_campaign=alai-amlatina

Por: Juan J. Paz y Miño Cepeda

 

Desde 1999 en adelante, entre los sectores democráticos y de izquierda, se creyó que el ciclo de los gobiernos progresistas abría un nuevo momento histórico. Parecía que su duración era indefinida. Los avances no solo en la estabilidad y hasta el crecimiento económico, sino sobre todo en múltiples mejoras sociales, aseguraban la permanencia de la tendencia progresista. Pero hubo demasiada confianza en los procesos electorales, porque los triunfos se sucedían y, en general, se descuidó la organización social, laboral y popular, así como el permanente trabajo ideológico para transformar viejos valores y conceptos y generar nuevas conciencias ciudadanas.

Pero el progresismo fue derrotado no solo a través de los golpes blandos, como en Brasil, Honduras o Paraguay, sino también por los triunfos electorales de las derechas en Argentina o Chile, e incluso por el giro absolutamente imprevisible, la ruptura total con la Revolución Ciudadana y la persecución institucional del “correísmo”, ocurridos en Ecuador, desde 2017.

De manera que al ciclo progresista ha sucedido el de la restauración conservadora, con el poder total de los sectores sociales de mayor elite y concentración de la riqueza económica en Latinoamérica. En la región -y especialmente en Sudamérica, cuna del progresismo- predominan hoy los gobiernos identificados con el gran capital y subordinados a la geoestrategia continental del americanismo.

El retorno de las derechas -nuevas o viejas- unifica posiciones en torno a múltiples áreas del manejo económico. Pero cuatro son las que están definiendo el marco del desarrollo de la región: la vinculación transnacional, el Estado, los impuestos y el trabajo.

 

El Grupo de Lima, plataforma impulsada por Luis Almagro y el Departamento de Estado norteamericano, como proyecto paralelo a las organizaciones internacionales tradicionales para producir un acuerdo regional contra Venezuela y de respaldo a las sanciones económicas, difundió un comunicado donde rechaza las últimas declaraciones del Secretario General de la OEA, precisando que no se debe descartar ninguna opción para derrocar el gobierno de Nicolás Maduro, ni siquiera la intervención militar.

 

Esta aparente manifestación de condena a una confrontación directa en territorio venezolano liderado por Estados Unidos, es consecuencia de una línea narrativa que viene tanteando la posibilidad de avanzar con ese plan, apoyándose en el relato de la "crisis de refugiados venezolanos", el "Estado fallido" y la supuesta amenaza que implica Venezuela para la región, en distintos órdenes. 

 

Al plantear con seriedad el ataque unilateral contra la República Bolivariana, los países de la zona se desvincularon del planteamiento, ejerciendo cierto pragmatismo frente a los sectores más hostiles contra la soberanía venezolana. La evidencia principal que deja este alejamiento, es que la idea de la intervención militar en Venezuela se ha posicionado fuertemente en medios y ha logrado escalar a los decisores de la Casa Blanca y el Pentágono. Se transforma en una amenaza creíble.

 

Pero esta salida diplomática no es nueva. En septiembre de 2017 Donald Trump se reunió al margen de la Asamblea General de la ONU con el ex presidente Juan Manuel Santos y los presidentes de Brasil, Panamá y Perú, presionando con el tema de invadir a Venezuela, propuesta que fue rechazada en consenso por los países consultados. 

 

Después del auge de los gobiernos antineoliberales en América Latina, la derecha ha retomado la iniciativa y ha desatado una fuerte contraofensiva de restauración neoliberal. Ese movimiento ha empezado con la violencia de la oposición y el aislamiento internacional de gobierno de Nicolás Maduro, en Venezuela. Ha seguido con la victoria electoral de Mauricio Macri en Argentina. Ha continuado con el golpe en Brasil que destituyó a Dilma Rousseff. Tuvo un nuevo episodio con la derrota de la consulta popular convocada por el gobierno de Evo Morales sobre la posibilidad legal de ser candidato a un nuevo mandato presidencial. Y se ha completado con la reversión del gobierno de Lenin Moreno que, elegido por la izquierda y con el apoyo decisivo de Rafael Correa, cambió de rumbo rápidamente y adhirió al movimiento de restauración conservadora en el continente.

Organizaciones vinculadas al Programa de Paz Multitrack entre Colombia y Suiza piden al nuevo presidente de Colombia, Sr. Iván Duque, avanzar en la construcción de paz y tomar medidas efectivas para la protección de lideresas y líderes sociales.

Quienes hacemos parte del Programa de Paz Multitrack entre Colombia y Suiza, entendemos que parte del mandato que le compete como presidente de Colombia, está asociado con garantizar el ejercicio del derecho a la paz consagrado en el artículo 22 de la Constitución Política. En desarrollo de tal precepto, avanzar en la implementación del Acuerdo Final de Paz ya suscrito por su antecesor y continuar el proceso de diálogo con el Ejército de Liberación Nacional, serían medios de lograr tal propósito. Como organizaciones de derechos humanos y apoyo al desarrollo, estamos dispuestos a trabajar conjuntamente en las acciones que su gobierno adelante en tal sentido.