En consecuencia, sin un inversionista que comprara o pusiera la caja para financiar la operación provocó que la vida útil de ULTRA AIR durara tan solo 13 meses. El 03 de abril de 2023 cerró operaciones. Las excusas cantinflescas emergieron, William y su amigo Óscar se justificaron en la devaluación del peso frente al dólar y en el aumento del precio de la gasolina. Esas explicaciones son nada más y nada menos que cortinas de humo para encubrir un engaño. Frente a eso surgen varias interrogantes, ¿Quién corrió el modelo financiero? La pregunta no es ingenua porque los miembros de la junta directiva eran Juan Carlos Altman (ex CEO LATAM AIRLINES), David Bojanini (Ex presidente Grupo Sura), Juan Alberto Londoño (Ex viceministro de Hacienda), Ilva Restrepo (Ex jefe de transporte aéreo AEROCIVIL). Todos ellos unas lumbreras con gran conocimiento y experiencia. ¿Entonces quién nos explica por qué estos sabiondos no incluyeron en el modelo financiero la variable de la devaluación del peso frente al dólar y el aumento del precio de la gasolina?
Mientras el modelo financiero hacia agua, ULTRA AIR siguió vendiendo tiquetes aéreos, lo hizo, a pesar de conocer que no tenía con qué pagar la nómina de empleados, ni dinero para comprar gasolina, ni tampoco con qué pagar el alquiler de los aviones. ¿Cuántos tiquetes vendieron en el primer trimestre del 2023? ¿cuánto dinero captaron del público? ¿Dónde está ese dinero? Algunas hipótesis afirman que fueron más de dos mil personas las defraudadas entre agencias de viajes y usuarios.
Paradójicamente la salida se las abrió la Superintendencia de Transporte quien le solicitó a la Superintendencia de Sociedades el inició del proceso de reorganización empresarial para ULTRA AIR. Así, el 10 de abril de 2023 William y Óscar coadyuvaron la solicitud de la Superintendencia de Transporte. Ellos presentaron una solicitud escueta, sin estados financieros de 2022 y simplemente con la declaración juramenta de tener pasivos por más de $8 MIL MILLONES DE PESOS. Obviamente no cumplieron con ningún requerimiento y es así como empezó la liquidación judicial. Hoy lo activos de ULTRA AIR escasamente superan los $200 MILLONES DE PESOS.
Con lo que no contó William y Óscar fue que la Superintendencia de Sociedades declaró que William Noel Alexander Shaw Lindsay es controlante de ULTRA AIR y que por lo tanto deberá responder subsidiariamente por las deudas de la empresa en liquidación judicial. Quiere ello decir, que como ULTRA AIR es una empresa de papel que no tiene activos para pagarle a los acreedores, entonces será William que responda con su propio patrimonio.
Por lo tanto, se hace un llamado a todas las personas naturales y/o jurídicas que compraron tiquetes aéreos a ULTRA AIR para que presenten sus créditos ante el liquidador Richard Andrés Pérez lo antes posible. Además, junto a esa reclamación instauren denuncias en la Fiscalía contra William Noel Alexander Shaw Lindsay y Oscar Hernán Herrera Restrepo por el presunto delito de estafa, puesto ellos engañaron al público en la venta de tiquetes aéreos y presuntamente obtuvieron un provecho económico con ello. Nuestra firma de abogados está en condiciones de representar sin cobrar honorarios a todas las personas que consideren merecen una compensación económica por los daños ocasionados por esas maniobras defraudatorias desplegadas por los representantes legales de ULTRA AIR SAS.
