“Corresponde a las plenarias corregir semejante despropósito, y a la ciudadanía mantenerse actuante y vigilante” manifestó Arias.

Respetado Congresista:

Que las sumas y restas del CREE no alcanzan para  sustituir los aportes parafiscales destinados al SENA, el ICBF y a la salud, ya lo había demostrado el estudio de Juan Pablo Sandoval que le dimos a conocer (comparativo parafiscales / CREE entre el 2000 y el 2010).

Los respectivos cuadros comparativos que distribuimos la semana pasada en Comisiones Terceras no fueron controvertidos por el gobierno porque no tiene respuestas. O al menos no las puede hacer públicas, por eso intenta enredar las cuentas, mantener las verdaderas cifras  y explicaciones “a puerta cerrada” y evitar que trascienda un hecho: en los cálculos presentados al Congreso por el gobierno, no alcanzaba para cubrir plenamente los recursos de la salud dejados de percibir por la eliminación de dichos parafiscales (y adicionalmente la disminución del 8% en Imporenta). Por eso presentaba siempre análisis parciales: sólo SENA e ICBF, sin incluir la totalidad del destino del 8% del nuevo CREE.

Cuando se le piden cuentas en una reunión técnica, el Director nada menos que de la Política Macroeconómica del Ministerio de Hacienda, Luis Fernando Mejía, responde a los trabajadores y estudiantes del SENA que le cuestionan con cifras en la mano: “… estamos viendo que en algunos años realmente la plata no alcanza y (la financiación) se hace a través del Presupuesto General de la Nación”. Y si los académicos, estudiantes y funcionarios del SENA e ICBF presentes, reclaman que se les explique la suerte de todo el 8% del CREE, incluida la salud con sus montos, procedencias y requerimientos, responde: “… qué pena ser tan franco, pero a ustedes que les importa de dónde sale el recurso de salud!”

Los estudiantes han dado a conocer la correspondiente grabación que adjuntamos –tomada con autorización del propio Luis Fernando Mejía (27.11.2012) –, sobre la cual afirman que, “de nuevo, de no existir tal registro, el público difícilmente daría crédito a nuestras denuncias”.

En la nueva grabación queda claro además, que la Ley 1429/2010 no ha tenido éxito en la generación y formalización de empleo, como no lo han tenido otras normas anteriores, a pesar de que estuvieron focalizadas sobre las pequeñas y medianas empresas, que son las que podrían responder por la mayor parte de la creación y formalización del empleo en Colombia.  Pese a ello, el Ministro insiste demagógicamente en que esta vez sí se producirá ese efecto.

En otro de los apartes, Mejía reconoce que la disminución del impuesto de renta al 25% ha sido recomendado por la OECD, es decir que tampoco resulta del ingenio o invención propia de funcionario gubernamental alguno.

El galimatías que intentó el gobierno va saliendo del oscurantismo y del secretismo. La ciudadanía va entendiendo que se disminuyen dos cargos a los empresarios (8% de impuesto de renta y 13,5% de parafiscales) y se crea uno (8% para el CREE), pero que el nuevo no compensa la suma de los dos anteriores.  Que por tanto no alcanza para cubrir plenamente lo hoy destinado a la suma de salud, ICBF y SENA. Y que el gobierno promete sacar la alta diferencia, de un Presupuesto General siempre insuficiente.

Pero lo que no sabía, porque el gobierno lo había ocultado, es que la merma del impuesto de renta para generar el CREE, se sustrae de la base para calcular las transferencias a los Municipios y Departamentos. La gravedad de esta circunstancia ha sido ocultada deliberadamente al Congreso y solo fue reconocida a última hora dada la insistencia del Representante a la Cámara Alejandro Carlos Chacón. Pese a ello, las Comisiones Terceras de Cámara y Senado votaron precipitadamente y sin suficiente discusión de tan medular asunto, y aún con un limitado quórum sin atender las solicitudes de votación nominal, todo para “ferrocarrilear” una reforma que cada vez se asemeja más a la “Reforma a la Justicia”. Corresponde a las plenarias corregir semejante despropósito, y a la ciudadanía mantenerse actuante y vigilante.