Con la ausencia de Jaime Garzón el humor político desapareció
En espera de JUSTICIA
Según cifras de la Fundación para la Libertad de Prensa, desde el año 2006 hasta lo que va corrido de 2011, han sido asesinados nueve periodistas en Colombia y otros 413 han sido víctimas de amenazas.
“ …Habían unos militares en Bogotá, que la justicia deberá averiguar quiénes eran en ese momento. Lo que yo he oído es que acusaban a Jaime Garzón de que estaba ayudando a negociar secuestros con el ELN, y que ellos estaban cerca de alguna investigación y aparecía Jaime Garzón en eso, entonces se estaba volviendo una molestia, ya que se estaba prestando con las familias y el ELN para llegar a acuerdos… Si algo le ha causado dolor al país es la muerte de Garzón. A Carlos (Castaño) le marcó mucho dolor, se arrepentía totalment de la muerte de Garzón. Si yo tuviera los nombres de los militares se los daría a la justicia porque creo que es una muerte que le ha causado mucho dolor al país y es justo que se conozca quiénes fueron los autores intelectuales de la muerte de Garzón…Carlos tenía contactos con los altos mandos militares” .
Ever Veloza, alias HH, entrevista Contravía (octubre de 2008). El 13 de agosto de 1999, cuando se desplazaba a la emisora Radio Net en donde trabajaba, fue acribillado por sicarios, Jaime Garzón, reconocido periodista, destacado crítico y admirado por los colombianos por la manera en que hacía humor, transformándose en populares personajes con los cuales muchos se sentían identifi cados, y con los cuales podía decir lo que no se permitía decir. Solo dos años después de este crimen se intentó realizar una inspección cerca al lugar de los hechos en donde se intentó recrear lo dicho por Martha Amparo Arroyave, quien fue considerada por la Fiscalía y el DAS como la principal testigo presencial del asesinato de Jaime Garzón, pero fue imposible. Por las declaraciones de esta mujer se dio captura a dos hombres. Lo que quedó claro más adelante y gracias a una investigación periodística de Holman Morris, fue que Amparo Arroyave, fue una testigo falsa. Con la captura de los presuntos sospechosos se perdió tiempo valioso en la investigación de este crimen.
S e g ú n A l i r i o U r i b e , a b o g a d o del Ccajar, en su momento relató a Contravía las incongruencias de la testigo: “Encontramos varias contradicciones, una es que María Amparo no se encontraba en una posición fácil para ver el lugar de los hechos. Estaba a más de 100 metros en un cuarto piso, y de manera diagonal en una posición que era muy difícil su visibilidad”.
Contravía en el 2003 advirtió al entonces Fiscal, Luis Camilo Osorio, sobre estas contradicciones y esto fue lo que respondió Osorio: “Hacer ese papel de defi nir si lo que hizo el Fiscal está bien concebido y bien formulado, sería anticiparnos a la justicia, por instrumentos que no son válidos. Nunca es tarde para encontrar las evidencias que corresponden, nunca es tarde para enderezar una investigación que haya estado defectuosa o contraria a la verdad y desde luego en este caso no puede haber la excepción”.
Por falta de pruebas, los sospechosos son exonerados. Y el caso Garzón queda sin piso. El juez encargado del tema pide investigar a Amparo Arroyave y a otros supuestos testigos por declarar con falsedad sobre este crimen. La supuesta testigo clave desaparece y en la Fiscalía de Luis Camilo Osorio se,archivó el caso.
E n 2 0 1 0 J o s é M i g u e l N a r v á e z , e x s u b d i r e c t o r d e l D e p a r t a m e n t o Administrativo de Seguridad (DAS), fue sindicado y cobijado con medida de aseguramiento por la Fiscalía como determinador del homicidio del periodista. Sin embargo, se puede decir que esto es lo único que se ha avanzado de este caso. En conclusión, sigue en la impunidad.
Por este motivo, hoy a doce años de cometido el crimen, la Comisión Colombiana de Juristas y el Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo en representación de la familia de Garzón anunció una demanda ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) (Comisión de Washington)contra el Estado colommbiano.
Con el crimen de Jaime Garzón no solo murió un periodista crítico, sino que prácticamente desapareció el humor político, eso es claro. Aunque haya algunos intentos, difícilmente podemos observar personajes de la altura, la capacidad de análisis y valentía para atreverse a mostrar con humor, la dolorosa realidad del país, como lo hacía Jaime. Hoy quizás el miedo, el compromiso económico que ata a los periodistas y a los artistas impide que nuevos Jaimes satiricen y puncen la vergonzante realidad de corrupción que vive Colombia. +